Estos son los restos de un diario visual que la cineasta grabó durante el último año que vivió en Buenos Aires. Las imágenes de la gran ciudad confluyen con audios de amigos y de su mamá, que desde la distancia y la cercanía iluminan momentos cotidianos con saltos en el tiempo, alternándose con notas de un cuaderno íntimo donde aparecen citas literarias, reflexiones y chismes en torno a hacer cine.